Londres, 20 dic (Prensa Latina) La Cámara de los Comunes del Parlamento Británico aprobó hoy el acuerdo negociado por el primer ministro conservador, Boris Johnson, para sacar al Reino Unido de la Unión Europea (UE) el 31 de enero próximo.
Tras un primer y único debate antes de comenzar el receso navideño, el nuevo legislativo acordó, por 358 votos a favor y 234 en contra, continuar a principio de enero con el escrutinio del controvertido tratado de retirada.
Contrario a lo sucedido en la legislatura anterior, cuando los parlamentarios se negaron en repetidas ocasiones a respaldar el acuerdo del Brexit presentado por el Ejecutivo, el resultado de este viernes no sorprendió a nadie, en virtud de la amplia mayoría que detentan ahora los conservadores en la Cámara baja.
Tras la votación, Johnson, quien hizo de la ruptura con la UE el tema central de la campaña electoral que concluyó la semana pasada con una resonante victoria de su partido, que se alzó con 365 de los 650 asientos parlamentarios, dijo que ahora se estaba un paso más cerca de la consumación del divorcio.
Según el gobernante, quien confía en lograr la aprobación final del acuerdo antes de finales del mes próximo, el respaldo otorgado este viernes también allana el camino para un «ambicioso acuerdo de libre comercio» con la alianza europea una vez concretado el Brexit.
El líder de la oposición parlamentaria, el laborista Jeremy Corbyn advirtió, no obstante, que el mal manejo por parte del Gobierno del proceso de salida paralizó el sistema político británico, dividió a las comunidades y provocó una «vergüenza nacional».
Tras aclarar que los diputados deben respetar el voto a favor del Brexit expresado por la mayoría de los británicos en el referendo de 2016, Corbyn, cuyo partido perdió 59 curules en los recientes comicios, aseguró que los laboristas no apoyarán la propuesta de Johnson.
Según el veterano político, quien tras la derrota electoral anunció que dejará el liderazgo del laborismo, existe una forma mejor de abandonar la UE, sin tener que vender los servicios públicos ni sacrificar cientos de miles de puestos de trabajo en el proceso.
El vocero del Partido Nacional Escocés, Ian Blackford, cuyo partido se alzó con 48 de los 59 escaños asignados a Escocia en el Parlamento británico, reiteró la oposición de la mayoría de los habitantes de ese territorio a abandonar el bloque europeo.
De acuerdo con el parlamentario nacionalista, Johnson conduce al país hacia el borde de un precipicio.
De su lado, el Partido Unionista Democrático, aliado tradicional de los Conservadores, también consideró preocupantes que el Brexit traiga consigo la instalación de controles aduaneros entre Irlanda del Norte y Gran Bretaña, como reza en el acuerdo firmado entre Londres y Bruselas.